Cada show de Los Decoradores celebra la inmortalidad de los temas de Patricio Rey y Los Redonditos de Ricota, la banda de los 80 y 90 que dejó mojones en la historia del rock nacional en la forma de canciones para que todos supiesen por dónde iba la ruta. No hay nostalgia, sino el saber que la vigencia de una era se mantiene.
Sus recitales recrean los rituales de la banda que lideraron el Indio Solari y Skay Beilinson, que sellaron con su estilo un tiempo musical y social determinado, e incluso lo amplían con la idea de que lo que abarcaban hace décadas iba más allá de la música y contemplaba lo artístico como una integridad. De allí que las funciones se llamen la Kermesse, propio de un evento masivo y alegre, como el que hoy, desde las 21, tendrá lugar en el club Floresta (avenida Colón 471).
Como siempre, a la cabeza de la banda estará Sergio Dawi, uno de los históricos integrantes de Los Redonditos, junto a Semilla Bucciarelli, Tito Fargo y Hernán Aramberri. “Este nuevo aterrizaje lo haremos con una invitada especial, con una voz única: Leti Lee. Traemos muchas sorpresas en el repertorio para hacer una kermesse donde vibraremos otra vez con una fiesta para disfrutar del reencuentro”, le anticipa a LA GACETA.
El músico destaca el impacto que significa cada presentación ante la llegada de nuevos seguidores. “Para nosotros es una sorpresa y una alegría poder contar con un público renovado y sentir que, por momentos, hay tres generaciones que vienen a disfrutar de nuestras noches: abuelo, padre e hijo. Poder transmitirle a los jóvenes cómo eran esas primeras épocas redondas. No somos ellos, pero el espíritu que se vive en cada show refleja mucho lo que fueron esos tiempos iniciales”, resalta.
Dawi reivindica ciertos valores que expresa la banda como la credibilidad y la sinceridad, para sostener su vigencia. Al ser consultado sobre si esos principios faltan en los músicos jóvenes, aclara: “El mar está llenos de peces. Es como todo, algunos la tienen y otros no, como también nos pasaba antes”.
“Queso ruso”
“Por momentos, una canción que pinta la situación actual -no sólo local, sino mundial- podría ser ‘Queso ruso’, responde en referencia al tema del disco “La mosca y la sopa”, lanzado en 1991.
“Pasó de moda el Golfo/ Como todo, ¿viste vos?/ Como tanta otra tristeza/ A la que te acostumbrás/ Ahora vas comprando perlas truchas sin chistar/ Calles inteligentes, alemanas para armar/ Y muchos marines de los mandarines/ Que cuidan por vos las puertas del nuevo cielo./ El bronceador Charlotte te cuida de la radiación/ Rematan el electro de Elvis al morir/ Fíjate de qué lado de la mecha te encontrás/ Con tanto humo el bello, fiero, fuego no se ve/ Y hay algo en vos que está empezando a asustarte/ Cosas de hechicería desafortunada/ Quédate con el vuelto, mula de la enfermedad/ Pobrete que sos tropa de la guita y chimpancé/ Quédate esa petaca con saliva y nada más/ Mordiéndote la lengua por poco me engañás/ Sentís la mosca joder, detrás de la oreja/ Y chupás la fruta sin poder morderla”, dice su letra.
“El artista debe tener conciencia; que tenga un compromiso o una actividad social depende de cada uno, pero la conciencia suma en todo sentido, también en el arte”, subraya.
Al momento de evaluar lo que está sonando, rescata que “el rock argentino tiene una diversidad y hay muchos grupos en los que me siento reflejado, pero si debería elegir uno sería Las Bodas Químicas”.